
Cuando era joven, uno de los debates más comunes en clase era "Sí o no a la eutanasia". Supongo que la respuesta a esta pregunta tiene más relación con las circunstancias que consideras que no con las mismas consecuencias. De hecho, algunos miden su decisión a partir de las primeras (dignidad, dolor, imposibilidad de recuperarse, etc.) mientras que otros se decantan por las segundas (asesinato, suicidio asistido, etc.)
Hacía tiempo que no me lo planteaba. Aunque por desgracia, no tanto, no creáis. Pero en este caso la idea me vino a partir de algo ligeramente diferente (o diferenciado). Unos vecinos (muy muy muy buena gente) tienen un perro (el bueno de Harry) al cual le ha picado un mosquito que le ha pasado la Leishmaniosis canina. Esta enfermedad afecta órganos vitales y si no se trata a tiempo, mata al animal. En caso que sí que se reaccione rápidamente, hay un tratamiento que se tendrá que administrar TODA LA VIDA. Casi nada. Bueno, casi todo, porque la alternativa es peor. Y la alternativa a la alternativa, peor todavía: el sacrificio. O mejor dicho, la eutanasia. Porque no es un sacrificio, ¿no?
No voy a meterme en cuestiones morales, pero no puedo evitar preguntarme "¿Por qué los animales tienen "derecho" a la eutanasia y los humanos, no?" O quizás, la pregunta esté mal hecha y lo que hacemos es correcto, porque ni los animales, ni los humanos tienen derecho a decidir. Unos por ley, y los otros porque ya hay quien decide por ellos.
Harry, mejora por favor.
PD. Para aquellos que tengan perros y hayan quedado un poco intranquilos, hay collares que ahuyentan a estos mosquitos.