jueves, 22 de noviembre de 2007

CINE: Promesas del Este


Desde que hace bastantes años vi Inseparables, he intentado evitar perderme cualquier propuesta de David Cronenberg. Así, por si no lo sabían (o recordaban), el señor Cronenberg ha dirigido grandes películas que todos conocen. Bueno, si no grandes, como mínimo, películas para el recuerdo. Entre ellas, Viernes 13 (la primera parte) y La mosca (la primera parte). Pero hay otras, bastante mejores, que posiblemente no les suenen tanto. Entre ellas, Videodrome o Scanners. Aunque todas estas para mí, no están a la altura de la primera, sus últimas dos cintas (Una historia de violencia y Promesas del Este) son muy buenas. Un poco violentas, sí. Pero buenas.

Esta vez la historia sucede en Londres. Un Londres poco fashion, donde viven familias inmigrantes del este de Europa, principalmente de la antigua URSS. Allí se encuentran las mafias y gente que ha llegado a occidente con la ilusión de cambiar su vida. Una de estas últimas, a punto de dar a luz, muere dejando un diario, en ruso, que llevará a la protagonista a buscar información de la familia del bebé. Y hasta aquí puedo leer.

Los actores están muy bien elegidos. Muy creíbles. Las secuencias, algunas de bastante dureza, hacen bastante creíble la historia. Así, una vez más, Cronenberg consigue hacer una película a la vieja usanza. Con una pequeña historia que va abriendo progresivamente onda expansiva hasta sorprendernos.

Conclusión: Seguiré siguiendo a Cronenberg. Por ahora, no me defrauda.

Nota: A (aunque está más bien entre A y B. Sobra alguna escena "típica americana")

lunes, 19 de noviembre de 2007

Lección

Los últimos fines de semana, he tenido la suerte de poder asistir a los actos de graduación de la UOC (Universitat Oberta de Catalunya) en Barcelona y Madrid respectivamente. Este tipo de actos suelen ser bastante aburridos. Recomendables incluso para cardíacos. Normalmente suelen servir para que unos cuantos padres y madres se sientan orgullosos de sus hij@s.

Siempre nos han dicho que los niños imitan a sus padres. No es siempre así, pero sí a menudo. Así, si unos leen, los otros también, si unos dicen malas palabras, los otros también, si unos lo uno, los otros,... también.

Los graduados y estudiantes UOC, como la propia universidad (virtual, a distancia) tienen ciertas características especiales. No son estudiantes normales. Aproximadamente un 99% de ellos trabajan (a jornada completa). Y por si fuera poco, son padres y madres de familia. Háganse una idea del tiempo que pueden dedicarle al estudio.

Me cuesta borrar de mi mente las caras de felicidad de los graduados recogiendo sus diplomas. Perdón. SUS diplomas. Porque se los han ganado. Sin duda. Como bien dijo la graduada que hizo el discurso en Madrid, los estudiantes de la UOC son "ladrones de momentos". Porque cada momento que dedican al estudio, se lo roban a sus familias. Por esto, emociona más. Emociona más ver que cuando recogen SU diploma giran la mirada, hacia el público, donde sus hijos reciben una gran lección. Una lección que jamás olvidarán. Nunca jamás.

jueves, 15 de noviembre de 2007

CINE: Supersalidos


Yo nunca iría a ver una película con ese título. Bueno, quizás sí. De hecho, no me la podría perder por nada del mundo. ¿Por qué? Pues eso mismo me pregunto yo. Pero claro, si voy a ver Bats, Rústicos en dinerolandia o incluso Independence day, por qué no Supersalidos. En fin, sólo voy a poner una excusa (no creible) más: lo hago para evitarles a ustedes el error.

De todos modos, quizás lo haya soñado pero juraría que había leído que estábamos ante una película interesante. Sí, no se si era en una crítica de Cándida, para Gomaespuma, o un simple comentario del "Pozí". Pero les juro que si no, lo he soñado. El hecho es que a parte, al estar restringida para mayores de 18 pensé que no sería una película "para adolescentes". En fin, no hay excusa que valga.

Los 15 primeros minutos estuvimos debatiendo con mis compañer@s si nos cambiábamos de la sala o no. La película era un cúmulo de insultos, palabrotas y "absurdeces" que no entendíamos o que no nos hacían la más mínima gracia. Realmente estuvimos a punto de irnos.

Pero a partir de un cierto momento, del cero más absoluto se pasa a un 3 o incluso 4, gracias a la aparición de la policía. Estos tienen algunos sketches graciosos y el tono de la película sube un poco. Repito, un poco.

En fin, voy a buscar al crítico que la recomendaba para ponerlo en mi lista negra (aunque quizás, a quien debería poner es a mi mism@).

Conclusión: Mala, mala, pero no tan mala como para llegar a ser película de culto.

Nota: C- (me sabe mal poner una D, por los policías)

lunes, 12 de noviembre de 2007

¿Vivimos en una república bananera?

¿Realmente somos tan egoistas como parecemos? Parece que saturno (ni el dios romano ni el planeta, el blogger) ha dado con una posible respuesta. O más bien, un indicio. En su primera entrada nos presenta a l@s NIMBYs, y a l@s BANANAs o bananer@s. Estas palabras definen a tod@s aquell@s que no son capaces de aceptar la construcciones de infraestructuras cerca de su casa. Así, l@s NIMBYs (Not In My Back Yard = No en mi jardín trasero) son l@s que luchan contra estas, si se proyectan cerca de sus casas, mientras que l@s BANANA (Build Absolutely Nothing Anywhere Near Anyone = No construyan nada cerca de nadie) son antitodo.

Si les interesa el tema, dense una vuelta por la República bananera.

Discúlpenme, tengo que dejarles. Esta tarde tengo manifestación a favor del paso del AVE por el litoral, luego contra el cuarto cinturón, y finalmente, iré a cortar la ronda para que no hagan la narcosala en el Valle Hebrón. Si es que estos políticos no tienen respeto ni por las obras de arte, ni por la naturaleza, ni por, por... pos ¡eso! Siesquesque...

viernes, 2 de noviembre de 2007

La cosa está mu malamente

No me gusta ser catastrofista. Pero las señales no dejan lugar a duda. No se alarmen. Bueno, mejor dicho, ¡sí se alarmen! Permítame mi Amigo Luís que use una de sus expresiones más celebradas como título, ya que creo que nos viene al pelo. Por que la cosa no está mala. Está ¡mu malamente!

Yo, me defino como persona positiva, pero esta vez las señales, insisto, son claras. Recuerden al señor Mariano Rajoy definiendo el problema del Prestige: "son sólo unos hilitos de plastilina". Todos lo vimos. Este hombre es un visionario.

Unos años después, uno de sus colegas, dejaba claro a todo un país: "el régimen irakí tiene armas de destrucción masiva".

Y qué decir de los días posteriores a aquel maldito 11 de Marzo. Acebes daba toda una lección de clarividencia: "la banda terrorista ETA es la principal linea de investigación...".

Y otros.

Pero lo que me preocupa es que el señor Rajoy ha vuelto. Y no ha vuelto sólo. Esta vez está aquí él, su primo y diez científicos más. Y ha vuelto fuerte: "no podemos considerar el problema del medio ambiente como el gran problema mundial".

Señoras, señores, agárrense fuerte, que esto se acaba. Recen lo que sepan. "Jesusito de mi vida. Tú eres niñ@ como yo..." :)