sábado, 31 de marzo de 2007

CINE: 300


Frank Miller es un claro exponente del Requetenacimiento: capaz de hacer guiones dignos de novela (ver Batman: Año 1 o El regreso del caballero nocturno), dibujar y entintar magistralmente sus obras (ver Sin city o 300), e incluso controlar que las películas basadas en sus obras no pierdan su toque personal (de hecho, es director de cine, también). Señor Miller, ¡a ver cuándo saca un disco!

Repitiendo, después del éxito de Sin city, en 300, aquellos con buena memoria (que no yo) ven en la película cada una de las viñetas del cómic. Por si fuera poco, la película aprovecha recursos que no nos puede ofrecer el papel, sacándole máximo rendimiento.

La puesta en escena, teniendo en cuenta que sólo se rodaron 3 horas de exteriores, es espectacular. Los actores, bien, no es difícil hacer el bruto, supongo. Y la historia, aunque la de siempre (David contra Goliath), muy bien contada.

Aquí no hay ni buenos ni malos, aunque sí, patanes y poderosos. Insisto, ni buenos ni malos, porque los espartanos no eran precisamente unas monjitas de la caridad. Y aun así, hay momentos en que te sientes identificado. Será eso de ponerse del lado del débil (bueno, no se si débil es la palabra adecuada).

Debo decir, eso sí, que si no le gusta la sangre (aunque digitalizada o solarizada o nosequé) quizás esta no sea la suya. Las películas sobre guerras, es lo que tienen. ¿Qué le vamos a hacer?

Conclusión: Ante el servicio militar obligatorio, los ejércitos profesionales, mucho mejor. ¿Y si en vez de esto, no nos peleamos? No, no, que eso sería inteligente. ¿Ven la relación con la entrada anterior de este blog?

Nota: B (ya saben, depende de gustos)

7 comentarios:

BUDOKAN dijo...

Esta película ha tenido diversas opiniones por lo que he leído en la web. Sólo me falta verla para ver en qué lado me ubico. Muy bueno el blog

Anónimo dijo...

302 cosas. Unas por desilusión y algunas por alusión:

Primero valoraré el trailer que con calzador biliar rubrica la entrada sobre la película:
Y sí, qué mala que es la guerra.

Por suerte vd albatros, que sí que lo es (inteligente empedernido), jamás utilizaría una polémica ajena como bálsamo a su rencor.


Después referirme a vd Sr sin tildes.
Lamento que este canal carezca también de otros tipos de énfasis comunicativos, ya que me temo que ha malinterpretado la malinterpretable palabra desnuda.
Mi carcajada no pretendía herir su susceptibilidad (blanco del que no tenía noticia), antes subrayar que sus previos comentarios de humor minimalista me habían hecho reír. Sin más.

En cuanto a los 300 restantes, confesar que hasta el momento no he seguido al sr Miller.
Eso sí, si el susodicho film es fiel a la obra original, y ésta a su vez es representativa de su talento, me temo que me quedaré sin coincidir con él.

No me desvela un concepto manido aunque la aportación visual sea remarcable.
A mí con 11(del patíbulo) ya me bastó. Dejaría el 289 restante para alguna gran avenida que lo precisara.


Saludos.

Unknown dijo...

Señor/a la revolución, en primer lugar, gracias por su opinión. Sólo una rectificación: yo no conozco el rencor. Es malo como la guerra.

Y una cosa más (en serio), no se pierda la película, y si puede, hágase con alguno de los comics que menciono. Le aseguro que no se arrepentirá. Le aseguro que cambiará su opinión sobre Miller. Ya nos contará.

Y sí, las guerras son muy malas (pero está claro que no para todos).

Anónimo dijo...

Yo también pasé un rato entretenido con esta película :-) Como dice Albatros en su valoración final, una peli con su gracia, aunque seguramente no es la que recomendarías si te las quisieras dar de sofisticado crítico de cine. Si has leido el comic, gana bastante.

De todos modos, no es exactamente David contra Goliath. Salvo en el caso que "David" sean los persas, observación con la que los espartanos de la película seguramente estarían de acuerdo.

Más bien es una historia en plan "viento divino", léase kamikaze...

PD: Ahora que nadie diga que ya he explicado demasiado porque las termópilas se aprenden en séptimo de EGB. De todos modos, en 300 es más importante la puesta en escena que la historia en si, creedme.

Unknown dijo...

Redhan, por esta vez se aceptan comentarios sobre el argumento, ya que, como bien dice, es historia.

Respecto a lo de David contra Goliath, conste, que no he dicho quién es quién. Estoy con usted.

Dudaba que la película le gustase a cierto tipo de cinéfilos, pero estoy recibiendo comentarios sorprendentes sobre ésta. Positivos.

Sólo añadir que, claramente, los músculos de los espartanos (que no son retocados digitalmente), claramente tienen un componente de batido proteínico.

Anónimo dijo...

Al romper el alba he partido en pos de una librería especializada y fiel a su ducha recomendación he adquirido un ejemplar de la obra de Frank Miller. De hecho iba siendo hora ya q era el único hermano que me quedaba después de haber consumido ávidamente toda la producción de Arthur y Henry.
Pasados unos minutos de febril lectura me he descubierto riendo y llorando como un niño. He lanzado puñetazos al aire y he danzado por la habitación(por primera vez sin tutú)combatiendo supervillanos imaginarios .
Me he sentido muy masculino y los dibujitos no sólo me han facilitado enormemente la lectura si no q me han deleitado d forma bárbara.
No veo el momento de hacerme con una camiseta de Batman o de alguna otra leyenda postmodena, y porqué no, de iniciar mis pinitos como coloreador de maquetas y figuritas de WarHammer. Quizá eso se me de bien y pueda poco a poco abandonar la residencia de mis padres.
Debo darle las gracias Albatros por iluminar mi tenebrosa vida y hacerme superar mis largas fustraciones en pos de un objetivo q de verdad me llena.
Ya no necesitaré emplear mi tiempo en enterrar mis limitaciones bajo comentarios ponzoñosos en blogs ajenos.

Sólo quiero antes de despedirme para siempre de este foro corregir al chisposo individuo q escribe sin tildes y al ingenioso(las cosas como sean, me quito el sombreroDon Luis Mata, ya q no me considero ni necio ni zote. Me siento más cómodo con el cariñoso apelativo de borrico. O borriquillo también, que es como me llama la gente del barrio de toda la vida.

Feliz semana santa a todos!

Anónimo dijo...

oh!